jueves, 9 de julio de 2015

PUERTO REAL, 1987: VICTORIA SOBRE LA RECONVERSIÓN

 

 [Texto basado en parte de un capítulo del libro CGT ¿anarcosindicalista? (1993) de Fernando Ventura Calderón, y que pusimos en nuestra sección «LO QUE QUIEREN QUE OLVIDEMOS» de la contraportada del PRISMA, nº 2.]

En 1974, España era la décima potencial mundial a nivel industrial[1], y la balanza comercial gozaba de superávit. A partir de 1981[2], tras la caída de Adolfo Suárez y la llegada del Partido Socialista al poder, de manera paralela a la entrada en la UE se pone en marcha el desmantelamiento de la industria pesada española. Las principales víctimas de la política desmanteladora de Felipe González fueron los astilleros: Astano (La Coruña), Reinosa (Cantabria), Sagunto (Valencia), Euskalduna (Bilbao) serán víctimas de una política a escala europea que, con la excusa de los bajos precios de los astilleros coreanos, busca acabar con un sector industrial considerado innecesario: el neoliberalismo y la globalización están en ascenso. Puerto Real, una localidad situada en la bahía de Cádiz y cuya economía giraba en torno a un enorme astillero, supo a finales de 1986 que el gobierno planeaba cerrarlo. Pero, a diferencia del resto de localidades, en Puerto Real la CNT tiene fuerza suficiente como para oponer resistencia a los planes del Estado.

Mientras los sindicatos «representativos» insisten en criticar la política del gobierno, la CNT explica a la gente que la crisis es un problema del capitalismo y que son sus ejecutivos los que tienen que buscar las soluciones que para eso cobran: la obligación del pueblo es defender sus puestos de trabajo y luchar por una sociedad justa, sin caer en trampas de hacer planes alternativos. La CNT dinamiza las asambleas, las radicaliza para que se exprese claramente cual es su sentir, habla con la gente... El 8 de enero de 1987 se celebra una asamblea en el astillero, y a propuesta de CNT se corta la carretera de acceso a Cádiz; en esta jornada se enfrentan a la policía: se forman barricadas, la policía carga y se producen algunos heridos. Será el primero de una serie de días en los que el pueblo de Puerto Real luchará contra las fuerzas de represión, los medios de comunicación, las manipulaciones políticas de partidos políticos y sindicatos... barricadas cada martes, cortes de tráfico, manifestaciones, concentraciones, asambleas, protestas estudiantiles... El 10 de febrero arde una arqueta de telefónica dejando 14.000 teléfonos fuera de servicio. El gobernador civil, Mariano Baquedo, afirma que «los disturbios son ocasionados por una minoría de trabajadores. Todos los demás no comparten los métodos violentos empleados por esta minoría» y amenaza con ocupar los astilleros (lo que se intentará días después). La CNT le responde que «los cortes de tráfico se decidían por mayoría en las asambleas, por lo que no es cierto que esas manifestaciones sean protagonizadas por una minoría de violentos. No somos violentos. Violentos son ellos que nos roban la dignidad quitándonos el trabajo. Estamos hartos de mil y una promesas incumplidas y no nos dejan otro camino que luchar permanentemente por nuestros puestos de trabajo. Que contraten barcos, verán como no estaremos en la carretera ni en la calle, sino trabajando».

Las fuerzas policiales intentan asaltar la factoría a comienzos de marzo, acorralando a los trabajadores que se refugian en un barco en construcción quedando sitiados hasta que la llegada masiva de personas a la factoría (unos 3000) desborda totalmente a la policía que inicia su repliegue seguida de gritos de ¡A la calle! Y ¡Fuera de mi casa! Las mujeres se autoorganizarán como asamblea mientras que los sindicatos «representativos» incapaces de contener a la gente[3], y son agredidos[4]. El gobernador civil en un ataque de nervios declara a la prensa que «son una banda de terroristas. A veces estoy deseando el estado de excepción... en cualquier caso yo sólo soy gobernador civil y mi misión no es contratar barcos» La CNT le responde: «Se está llevando a los trabajadores a un clima de desesperación... pero claro, esto al señor gobernador debe importarle bien poco. No es de su competencia. Demasiado ocupado anda el hombre apareciendo en inauguraciones, entregas de placas y otras fiestas a las que es tan aficionado». Al día siguiente será cesado en su cargo por su evidente incompetencia, pero la policía continuará su política de acciones de terror organizado, a las que se une la empresa declarando ilegalmente el cierre patronal. El 9 de abril, son ya 8.000 personas las que cortan la carretera, y hasta los niños juegan a policías y manifestantes.

El 27 de mayo 27.000 personas se manifiestan por las calles, y el Estado y Comité de Empresa inician negociaciones para parar las protestas[5]. El protagonismo pasa entonces a las mujeres, que continúan con su política de enfrentamientos y cortes de carretera, siendo apaleadas, atacadas con gases, pelotas de goma, chorros de agua a presión, porras..., repitiendo a pesar de ello sus acciones sin echarse atrás, mostrando bastante más coherencia que los hombres; el 7 de julio un niño de 12 años es herido y apaleado cuando defendía a su madre. El 9 de junio, la CNT reinicia las protestas en solitario, y el gobierno finalmente se rinde: «milagrosamente» el astillero tendrá trabajo, gracias a contratos con Francia para la construcción de barcos. La fuerza de las asambleas populares, el rechazo al politiqueo y el «problema de orden público» fueron la base de la victoria: sin ello, el astillero de Puerto Real habría sido desaparecido víctima de la reconversión.


NOTAS:

martes, 2 de junio de 2015

LA REEDICIÓN DEL NÚMERO 54 (DE 1999)

Contraportada y portada del AyR 54.
En el verano de 1999, justo poco después de la Guerra de Kosovo, sacamos un número especial sobre el conflicto y los intereses occidentales que había detrás de tal. Ese año, y los anteriores, era normal por parte de nuestros medios culpabilizar de todo a los serbios. Los serbios eran los malos y, en este caso, los albaneses eran las víctimas, que estaban sufriendo, ni más ni menos que un genocidio. Genocidio inventado por nuestros medios para justificar los bombardeos de Serbia, en nombre de una hipócrita «ayuda humanitaria». Habia 'plumiferos' de todos los espectros políticos de este país que defendían esta intervención militar, desde el derechista Hermann Tertsch  hasta el pseudolibertario Carlos Taibo...  Aquí os reproducimos el Editorial de este número.

Y quien desee descargárselo, lo tenemos a vuestra disposición en nuestra cuenta de Scribd:



LOS LOGROS DE LA PROPAGANDA

Los medios de comunicación de las «democracias» occidentales han conseguido lo que nunca logró el aparato propagandístico del III Reich, a saber, el dominio imperialista de los Balcanes sin apenas generar una reacción hostil en la opinión pública. Y es que el capitalismo liberal sabe que bombardear a las masas con mentiras suele ser más efectivo y rentable que hacerlo con napalm o «tomahawks», aunque si lo primero fracasa siempre queda el recurso al uso de lo segundo. Así las acusaciones de «limpieza étnica» contra los «serbios» (o más bien «yugoslavos») son ampliamente aceptadas por la población telespectadora occidental, e incluso por gran parte de la izquierda anti-OTAN que se ha mostrado incapaz de desarticular el falaz argumento sobre el que se ha venido basando la criminal intervención de las potencias occidentales en los Balcanes.

Para empezar, la versión occidental de los acontecimientos recientes ocurridos en Yugoslavia («el gobierno yugoslavo está exterminando musulmanes al más puro estilo nazi, hay que parar el genocidio», etc.) debería de haber sido sometida a un riguroso análisis crítico para comprobar su veracidad, en vez de darla por válida a priori; no es la primera vez que occidente falsifica la realidad para justificar la agresión imperialista. En este sentido, la comparación entre Milosevic y Hitler o entre los nazis alemanes y el pueblo serbio no es más que el maquiavélico fruto de una campaña de intoxicación informativa encomendada por el gobierno de los Estados Unidos a la empresa de relaciones Ruder & Finn. De hecho el representante de esta firma norteamericana, James Harff dio todo tipo de detalles sobre dicho montaje mediático delante de las cámaras de Canal 2 de la televisión francesa, asegurando que «fuimos capaces de ofrecer una historia de buenos y malos». Asimismo, Harff admitió que la demonización de los serbios se consiguió a base de difundir rumores infundados y relatos de atrocidades y crímenes de guerra sin verificar. También desveló el responsable de la Ruder & Finn quienes eran los clientes de su empresa: los poderes separatistas de Croacia y Bosnia y los nacionalistas albaneses de la provincia serbia de Kosovo. Asimismo, Harff admitió que para asegurar el éxito de esta campaña contactó con organizaciones judías de EEUU de ultraderecha (la Liga Anti-Difamación, el Comité Judío Americano y el Congreso Judío Americano).

No obstante, esta vergonzosa campaña de difamaciones fue contestada por colectivos de judíos progresistas, como el Grupo de Supervivientes del Campo de Concentración de Buchenwald, con base en los propios EEUU, y cuyo representante John Ranz, declaró: «la gigantesca campaña para lavar el cerebro de los EEUU a cargo de los medios de comunicación en contra del pueblo serbio es algo absolutamente increíble, con su dosis diaria de información sesgada y sus malévolas mentiras.» Ranz lamentó que hubiera organizaciones judías que prestaran apoyo a los separatistas croatas y bosnio-musulmanes y recordó cómo éstos fueron colaboracionistas nazis y verdugos de los judíos yugoslavos durante los años de la II Guerra Mundial y señaló que «cada judío, cada víctima del nazismo y cada ser humano debería saber y comprender por qué los serbios están luchando tan desesperadamente contra tan poderosas fuerzas y por qué han adoptado nuestro eslogan post-Holocausto: 'NUNCA MÁS' [...] Los serbios combatieron a los nazis, pagaron muy caro el situarse al lado de los aliados contra Hitler. Salvaron a muchos soldados aliados, incluyendo cientos de aviadores norteamericanos. Acogieron a los partisanos judíos como hermanos».* Las declaraciones de este ex-prisionero son tan elocuentes que sobran los comentarios... ¿O es que alguien se atreve todavía a tildarle de «nazi» por negar la supuesta campaña de «limpieza étnica» serbia?

No se trata por tanto de pedir simplemente la «paz» en los Balcanes; todo el mundo quiere la paz; Occidente quiere la paz; la OTAN quiere la paz; el Papa quiere la paz, incluso Hitler quería la paz... pero ¿en qué condiciones? He aquí la pregunta clave. Obviamente, occidente quiere una paz que implique el sometimiento de los pueblos balcánicos como lo quiso Hitler en los años 40. Consecuentemente, la lucha contra la campaña criminal de la OTAN en el sufrido país balcánico debe partir de una base antiimperialista y no de un pacifismo vago e inocuo. ¡Basta ya de medias tintas y de actitudes políticamente correctas que son fácilmente asimilables por el sistema!

¡ANARQUÍA Y ANTIIMPERIALISMO!



   * Todas las cifras han sido tomadas del artículo «Neoliberalism: The Balkan Scenario», difundido en Internet por el Centro de Solidaridad con Latinoamérica de Dublín (Irlanda).

lunes, 25 de mayo de 2015

domingo, 24 de mayo de 2015

YA ESTÁ DISPONIBLE EL NÚMERO 2 DE 'PRISMA'

En Europa, como en el resto del mundo occidental, tenemos la idea preconcebida de que en los países musulmanes impera la religiosidad más absoluta y recalcitrante. Parece que ya no nos acordamos del laicismo defendido por regímenes como el baasista de Siria y, anteriormente, de Irak o el nasserismo egipcio. La realidad contradice tal prejuicio nuestro. En el mundo islámico, en especial los países árabes, hay también variedad de creencias e ideologías, no siendo monopolio de nuestro «civilizado» Occidente. Aunque, lamentablemente, impere con mucha fuerza el integrismo fanático religioso, también hay tendencias aconfesionales ocultas o semiocultas. En concreto, definirse abiertamente ateo implica una persecución, y hasta el encarcelamiento, que viola todo derecho a la libertad de expresión. Aún así, existen, y con más fuerza, tras la llamada «Primavera árabe».

Aunque el islamismo radical del salafismo y los Hermanos Musulmanes sea lo más conocido, lo opuesto también se manifiesta en tales sociedades, son minoría pero muy activa que sigue creciendo. Sociedades hipócritas en las cuales domina más la apariencia. Como escribió el periodista marroquí exiliado Ahmed Bemchesi para New Republic, el 23 de abril de 2015: «En el mundo árabe actual no es la religiosidad lo que es obligatorio; es la apariencia de la misma. Actitudes y creencias no religiosas son toleradas siempre y cuando no sean visibles».

Pero el laicismo y el librepensamiento, aunque proscritos, se van abriendo camino. Como decía el estudiante ateo, también marroquí, Eddin Habib: «Al igual que para los gays, ha llegado el momento de reclamar ‘el orgullo ateo’». Y no sólo es el ateísmo, también surge el feminismo y el anarquismo como respuesta al confesionalismo social dominante.

Por otro lado, en Europa, como reacción a la presencia de inmigrantes musulmanes, tiene cada vez más presencia la islamofobia, un sentimiento irracional que se sirve de tal prejuicio para justificarse. Prejuicio basado en la más absoluta ignorancia, que tiene detrás otros motivos, como nos refleja Emmanuel Todd en una entrevista.

Sobre estos temas (y otros más) habla nuestra última circular gratuita PRISMA:

PRISMA 2
CONTENIDO
Ateismo en el mundo islámico (DOSSIER)
o «Los ateos Invisibles - La difusión del ateismo en el mundo árabe», por Ahmed Benchemsi (New Republic, 23/04/2015)
o La red, refugio del ateismo en el mundo islámico
o «¿La edad de oro del ateísmo árabe?», por Asad Abukhalil (21/05/2013)
o «El Ateismo se extiende en Arabia Saudí», por Caryle Murphy (GlobalPost, 12/06/2014)
o «Anarquismo y Feminismo como reacción al auge del islamismo», por Yeghig Tashjian (Strategic Outlook, 03.2013)
o Ferrer, martir del laicismo árabe
o Tunez y la aparición del anarquismo en el mundo árabe
o «Entrevista con una atea árabe», por Esraa al-Bahrain (Mideast Youth, 18/10/2007)
• «Yo no soy Charlie» - Entrevista con Emmanuel Todd
o Todd, 'enfant terrible’ francés
• «La unión de los agresores. El imperialismo silencioso de la UE», por Gregor Schirmer (Junge Welt, 02/05/2014, extractos)
o Somalia, un robo a mano armada
o Abusos sexuales y corrupción: la cara oculta del intervencionismo de la UE
o «Preocupación en Francia por el rearme alemán», por Kumaran Ira y Alex Lantier (wsws.org, 06/04/2015)
• «La OTAN entra en Serbia gracias a la UE», por Rabioso
o Imperialismo en nombre de Auschwitz
• «Misteriosas muertes en Ucrania», por William Blum (Consortiumnews, 03/04/2015)
o Blum: Matando la esperanza
• «La sombra de la guerra de Libia es alargada», por Rabioso
o Hapag-Lloyd recomienda no ayudar a los refugiados
• «Las redes de inmigración ilegal, el enemigo invencible», por Patrick Kingsley
• Lo que quieren que olvidemos - «Puerto Real, 1987: Victoria sobre la reconversión», por Fernando Ventura Calderón (extractos del libro CGT ¿anarcosindicalista?)

Para poder obtenerla (en formato PDF) basta con pedirlo escribiendo a nuestro correo electrónico:
colectivo.editorial.ayr@gmail.com

¡Os esperamos!


sábado, 2 de mayo de 2015

TRABAJADORES: NO CELEBREMOS LA FIESTA DEL DOS DE MAYO


    [Recordemos que esta fecha —junto al 12 de Octubre— durante muchos años (gran parte de los siglos XIX y XX) fue considerada fiesta nacional. Este texto antinacionalista (en este caso, contra el españolismo más casposo) fue escrito por el socialista Francisco Mora Méndez en 1870 (en tiempos de la Primera Internacional, cuando marxistas y anarquistas estábamos juntos), y publicado en El proletariado militante de Anselmo Lorenzo.]


A LOS TRABAJADORES DE MADRID
La fiesta del Dos de Mayo

Trabajadores: No celebremos la fiesta del Dos de Mayo.

Cuando todos los obreros del mundo se tienden fraternalmente la mano a través de los continentes y los mares, pensar en fiestas patrióticas, pensar en la eterna causa de nuestra desunión, es el mayor de los crímenes.

El patriotismo es una idea que tiende a separar a los pueblos entre sí, y a mantener constantemente el odio entre hombres que, siendo hermanos, les hacen creer los tiranos y los explotadores que no lo son, porque se interpone entre ellos el profundo lecho de un río o las elevadas cumbres de una cordillera de montañas.

La idea de patria es una idea mezquina, indigna de la robusta inteligencia de la clase trabajadora. ¡La patria! La patria del obrero es el taller; el taller de los hijos del trabajo es el mundo entero.

Cuando la tierra yacía bajo la dura planta de la barbarie y la ignorancia, la idea de Patria era el astro esplendoroso que iluminaba de cuando en cuando aquella larga noche de espesísimas tinieblas. Pero hoy, en los tiempos de las ideas internacionales, la patria no tiene objeto alguno.

El patriotismo ha cumplido su misión; que descanse en paz en el panteón destinado a las ideas del pasado.

Desde que la tribu salvaje y vagabunda de la infancia de la humanidad descendió de la montaña a apoderarse de los frutos de la tribu laboriosa que habitaba la llanura, hasta la época presente, no ha cesado esa larga serie de invasiones que han producido hechos tan memorables como el paso de las Termópilas, la batalla de Roncesvalles, el Dos de Mayo y otros mil actos, en los cuales los vencedores de hoy han sido los vencidos de mañana. ¿Qué nación, qué provincia, qué pueblo, y en el pueblo, qué barrio, qué calle, y en la calle en qué casa no tendrán sus moradores que celebrar un triunfo alcanzado sobre sus vecinos, o llorar una derrota y un martirio ocasionado por los mismos?

Trabajadores: No vayáis al Dos de Mayo, porque es fácil que al lado de aquellas tumbas veneradas, cubiertas de laurel y siemprevivas, se levanten amenazadores los ensangrentados espectros de la raza americana sacrificada, destruida inhumanamente, a título de civilización, por nuestros antepasados los conquistadores del Nuevo Mundo. No vayáis al Dos de Mayo, porque es fácil que alrededor de aquellos gigantescos cipreses se encuentren vagando las víctimas que el fanatismo de nuestros padres hizo sacrificar en los Países Bajos y en la conquista de Italia. No vayáis al Dos de Mayo, adonde os impulsan a ir nuestros explotadores porque os embriagaréis de odio patriótico contra nuestros hermanos franceses, extranjeros en su patria como nosotros lo somos en la nuestra, gracias a la organización de la presente sociedad. Ellos no tienen la culpa de las víctimas causadas por los planes de un hombre ambicioso y cruel que cruzó por Europa como un meteoro de fuego, no dejando en pos de sí más que lágrimas y sangre.

Todos los habitantes de este planeta que gira en el espacio infinito en unión de un número inconmensurable de mundos, son hermanos. Todas las ideas que se opongan a la libertad, igualdad y fraternidad de los hombres, son injustas. El patriotismo, que se opone a la fraternidad de los pueblos es, pues, injusto.

Trabajadores: En nombre de la justicia, en nombre de la emancipación de la clase oprimida, en nombre de la Asociación Internacional de los Trabajadores, no celebréis la fiesta del Dos de Mayo.

Por la Sección Internacional de Madrid. – El Comité.

viernes, 1 de mayo de 2015

PRIMERO DE MAYO: SER O NO SER. LA CLASE TRABAJADORA, PROTAGONISTA DEL CAMBIO

 

Otra vez llega el Primero de Mayo, y seguimos viviendo en condiciones de pobreza física y mental, las cuales no hemos elegido ni en la forma ni en el fondo, sufriéndolas como clase con una resignación que resulta insultante.

Hay quien piensa que lo anterior se refiere al Primero de Mayo histórico, pero no nos engañemos: tiene que ver con el Primero de Mayo aquí y ahora. Ya que en épocas pasadas, para disgusto de muchos, la clase obrera consiguió convertirse en actriz protagonista de la sociedad. Elegía su papel, redactaba su propio guión, decidiendo dónde y cómo actuar. No necesitaba apuntadores ni regidores, actuaba por sí misma en función de sus propios intereses y valores, encaminados a cambiar todas las injusticias y desigualdades sociales a las que estaba sometida. Conseguimos llenar taquilla hasta desbordar el aforo del teatro en el que querían que actuáramos, y cambiamos su realidad transformando la nuestra. Juntos, como una misma clase consciente y concienciada, éramos el espectáculo en vivo y en directo.

Este año, como todos los años electorales, asistimos a otro tipo de espectáculo: el ilusionismo político. De poco vale esperar cambios profundos metiendo sangre nueva en las instituciones. Hay una vieja verdad que a cada tanto reverdece: el poder corrompe a quien lo ostenta. La experiencia demuestra que no podemos aspirar a transformar la sociedad desde los parlamentos; en la CNT pensamos que no se puede construir un mundo nuevo, más libre e igualitario, utilizando las herramientas que nos dieron los amos.

Las operaciones Pandora y Piñata son un preestreno por la puerta grande de lo que nos espera con la "ley mordaza". Queremos aprovechar esta jornada de lucha para expresar nuestra profunda repulsa por la aprobación de dicha ley, cuyo objetivo es paralizar toda resistencia y movilización en la calle. Por ello nos solidarizamos con todos los detenidos en las últimas operaciones contra colectivos del movimiento libertario y anarquista.

Nuestros gobiernos, independientemente del actor que interprete el papel, no son otra cosa que meros títeres de los poderes económicos y financieros, de las élites de las grandes compañías y de la banca, que nos condenan a una vida de miseria y esclavitud, trabajando sin derechos laborales o condenados al paro, marginados, endeudados, desahuciados de nuestros hogares, acosados con impuestos y tasas, con recortes en las pensiones, sufriendo la privatización, sin servicios públicos de primer orden como sanidad y educación, obligados a emigrar del país... En el circo montado a nuestro alrededor nos distraen con los círculos de las tres pistas, llevándonos a aplaudir mentiras mediáticas, farsas electorales de cambio o aventuras militaristas, y esperando un final de la crisis económica que en realidad nunca llega, ni llegará mientras sigamos creyendo sus mentiras.

Para ser protagonistas de nuestra propia vida y cambiar la sociedad, convirtámonos todos en artistas de calle. Pero en vez de hacer reír, consigamos que la gente reaccione, pierda el miedo, y se sume a la lucha.

Construyamos la alternativa, una alternativa de clase y anarcosindicalista.

¡Aquí y ahora, Primero de Mayo! ¡Organízate y lucha!